viernes 7 Junio 2013 : Carta de San Pablo a los Romanos 5,5b-11.

la cual no quedará frustrada, pues ya se nos ha dado el Espíritu Santo, y por él el amor de Dios se va derramando en nuestros corazones. Fíjense cómo Cristo murió por los pecadores, cuando llegó el momento, en un tiempo en que éramos impotentes. Difícilmente aceptaríamos morir por una persona “justa”; tratándose de una buena persona, tal vez alguien se atrevería a sacrificar su vida. Pero Dios dejó constancia del amor que nos tiene: Cristo murió por nosotros cuando todavía éramos pecadores. Con mucha más razón ahora nos salvará del castigo si, por su sangre, hemos sido hechos justos y santos. Cuando éramos enemigos, fuimos reconciliados con él por la muerte de su Hijo; con mucha más razón ahora su vida será nuestra plenitud. No sólo eso: nos sentiremos seguros de Dios gracias a Cristo Jesús, nuestro Señor, por medio del cual hemos obtenido la reconciliación. June 06, 2013 at 10:50AM
Etiquetas:

Publicar un comentario

[facebook][blogger][disqus]

Hermanos Franciscanos

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.