08/19/18

2:13 a.m.
Bloch-Sermon_On_The_Mount

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_”Verbum Spei”_
_”Palabra de Esperanza”_
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*20° Domingo Tiempo Ordinario*
*El Evangelio de hoy*
*Juan 6, 51-58*

En aquel tiempo, Jesús digo a los judíos: “Yo soy el pan vivo, que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo les voy a dar es mi carne para que el mundo tenga vida”.
Entonces los judíos se pusieron a discutir entre sí: “¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?”
Jesús les dijo: “Si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no podrán tener vida en ustedes. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día.
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él. Como el Padre, me ha enviado, posee la vida y yo vivo por él, así también el que me come vivirá para mí.
Éste es el pan que ha bajado del cielo: no es como el maná que comieron sus padres, pues murieron. El que como de este pan vivirá para siempre”.

*Reflexión:*
Es curioso cómo siempre nos solemos mover por la sed y por el hambre. De hecho, solamente nos damos cuenta de esto cuando una de estas dos cosas nos hace falta.
También hay otro tipo de sed y de hambre que nos mueve. Una sed y un hambre más profundas. Sed que traducimos en sueños, en proyectos…, ilusiones, incluso problemas en los que buscamos saciarnos pero, al final, el hambre y la sed regresan y cada vez con más intensidad.
¿Qué es lo que nos hace falta? ¿Cómo es que podemos saciar la sed y el hambre que hay en la profundidad de nuestra alma?
Muchos hemos tratado de responder a esta pregunta de diversas maneras, a lo largo de nuestra vida, tomando agua y alimentos que, externamente, parecían estar muy bien pero que, al final, nos intoxicaron. Y también hemos tomado otros alimentos que no necesariamente nos hicieron mal pero que simplemente calmaron nuestra necesidad temporalmente.
Es difícil de creer, pero las palabras de Jesús en el Evangelio no necesitan de metáfora o una imagen para explicarlas pues lo dice muy claramente: “Yo soy el pan de vida”. Es decir, “Yo soy lo que tú necesitas; Yo soy la verdadera fuente que puede saciar tu sed y hambre profundamente. ¿Te has dado cuenta que lo que tú tienes es sed y hambre de Eucaristía?”

*Oración:*
Señor Jesús, sé que en Ti encuentro lo que mi vida necesita. No deseo buscar más. Amén.

*Acción:*
Recibiré en este domingo, con especial fervor, a Cristo Eucaristía.
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_“Nuntium Verbi Dei”_
_“Mensaje de la palabra de Dios”_
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