04/24/18

6:13 p.m.
Bloch-Sermon_On_The_Mount

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*”Verbum Spei”*
_”Palabra de Esperanza”_
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*4° Miércoles Pascua*
*El Evangelio de hoy*
*Marcos 16, 15-20*

En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: “Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda criatura. El que crea y se bautice, se salvará; el que se resista a creer, será condenado. Estos son los milagros que acompañarán a los que hayan creído: arrojarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos, y si beben un veneno mortal, no les hará daño; impondrán las manos a los enfermos y éstos quedarán sanos”.
El Señor Jesús, después de hablarles, subió al cielo y está sentado a la derecha de Dios. Ellos fueron y proclamaron el Evangelio por todas partes, y el Señor actuaba con ellos y confirmaba su predicación con los milagros que hacían.

*Reflexión:*
Festejar a un apóstol, nos remonta a las primeras comunidades en las cuales, la Palabra de Dios no era una opinión más, sino verdaderamente una revelación de lo que Dios ha ofrecido a los hombres: La vida en abundancia.
Esta nueva vida que se nos ha revelado por Cristo, no sólo es una nueva manera de vivir, sino una vida al servicio del Evangelio y de los demás, una vida vivida en el poder de Dios. Hoy hemos escuchado que todos los que crean en esta nueva vida, tendrán poder para mostrar las señales que el Maestro había realizado.
Es por ello, una vida que nos hace ser no únicamente testigos, sino continuadores de la obra salvífica de Cristo. Es necesario que los cristianos de este tiempo creamos realmente que la Palabra de Dios es verdadera y que en la medida en que la vivimos somos portadores del mensaje de salvación.
Arriésgate a creer y deja que el poder de Dios se manifieste en tu vida.
(Evangelización Activa).

*Oración:*
Señor Jesús, me humillo ante tu presencia, pues sólo me interesa la honra que de ti pueda recibir; dejo en tus manos todas mis preocupaciones, pues sé que eres tú quien me cuida. Dame una fe inconmovible, Dios mío, para resistir las acechanzas del demonio. Por tu amor restáurame, afiánzame en ti y fortaléceme para mayor gloria tuya. Amén

*Acción:*
Este día me esforzaré por mantener una actitud de humildad, esperando que sea Dios mismo quien me levante en cada situación.
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*”Nuntium Verbi Dei”*
_”Mensaje de la palabra de Dios”_
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10:48 a.m.
De la misma manera, ustedes, los jóvenes, sométanse a los presbíteros. Que cada uno se revista de sentimientos de humildad para con los demás, porque Dios se opone a los orgullosos y da su ayuda a los humildes. Humíllense bajo la mano poderosa de Dios, para que él los eleve en el momento oportuno. Descarguen en él todas sus inquietudes, ya que él se ocupa de ustedes. Sean sobrios y estén siempre alerta, porque su enemigo, el demonio, ronda como un león rugiente, buscando a quién devorar. Resístanlo firmes en la fe, sabiendo que sus hermanos dispersos por el mundo padecen los mismos sufrimientos que ustedes. El Dios de toda gracia, que nos ha llamado a su gloria eterna en Cristo, después que hayan padecido un poco, los restablecerá y confirmará, los hará fuertes e inconmovibles. ¡A él sea la gloria y el poder eternamente! Amén. Les escribo estas palabras por medio de Silvano, a quien considero un hermano fiel, para exhortarlos y atestiguar que esta es la verdadera gracia de Dios: permanezcan adheridos a ella. La iglesia de Babilonia, que ha sido elegida como ustedes, los saluda, lo mismo que mi hijo Marcos. Salúdense los unos a los otros con un beso de amor fraternal. Que descienda la paz sobre todos ustedes, los que están unidos a Cristo.

10:48 a.m.
Cantaré eternamente el amor del Señor, proclamaré tu fidelidad por todas las generaciones. Porque tú has dicho: «Mi amor se mantendrá eternamente, mi fidelidad está afianzada en el cielo.» El cielo celebre tus maravillas, Señor, y tu fidelidad en la asamblea de los santos, porque ¿quién es comparable al Señor en las alturas? ¿quién es como el Señor entre los hijos de Dios? ¡Feliz el pueblo que sabe aclamarte! Ellos caminarán a la luz de tu rostro; se alegrarán sin cesar en tu Nombre, serán exaltados a causa de tu justicia.

10:48 a.m.
Entonces les dijo: "Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación." El que crea y se bautice, se salvará. El que no crea, se condenará. Y estos prodigios acompañarán a los que crean: arrojarán a los demonios en mi Nombre y hablarán nuevas lenguas; podrán tomar a las serpientes con sus manos, y si beben un veneno mortal no les hará ningún daño; impondrán las manos sobre los enfermos y los curarán". Después de decirles esto, el Señor Jesús fue llevado al cielo y está sentado a la derecha de Dios. Ellos fueron a predicar por todas partes, y el Señor los asistía y confirmaba su palabra con los milagros que la acompañaban.

10:48 a.m.
Después que Nuestro Señor fue resucitado de entre los muertos y los apóstoles fueron revestidos de la fuerza de lo alto por la venida del Espíritu Santo (Lc 24,49), tuvieron la certeza absoluta y el conocimiento perfecto sobre todo. Entonces llegaron hasta los extremos de la tierra (Sl 18,5), y ellos que poseían todos por igual y cada uno en particular el Evangelio de Dios, proclamaron la buena nueva que nos viene de Dios y anunciaron a los hombres la paz del cielo. Así Mateo, para los hebreos, y en su propia lengua, publicó una forma escrita de Evangelio, mientras que Pedro y Pablo evangelizaron Roma y fundaron la Iglesia. Marcos, el discípulo e intérprete de Pedro (1P 5,13), después de la muerte de éste nos transmitió también por escrito la predicación de Pedro. Por su parte, Lucas, el compañero de Pablo, consignó en un libro el Evangelio predicado por ése. Finalmente, Juan, el discípulo del Señor, el mismo que reclinó su cabeza sobre el pecho de Jesús, publicó también el Evangelio, durante su estancia en Éfeso… Marcos, intérprete y compañero de Pedro, presentó de esta manera el principio de su redacción del Evangelio: “Comienza el Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios. Está escrito en el Profeta Isaías: Yo envío mi mensajero delante de ti para que te prepare el camino”… Vemos que Marcos hace de las palabras de los santos profetas el comienzo del Evangelio, y aquel que los profetas proclamaron Dios y Señor, Marcos lo designa ya al principio como Padre de nuestro Señor Jesucristo… Al final de su Evangelio, Marcos dice: “El Señor Jesús, después de hablarles, ascendió al cielo y se sentó a la derecha de Dios”. Es la confirmación de la palabra del profeta: “Oráculo del Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha y haré de tus enemigos estrado de tus pies” (Sl 109,1).