10/06/19

11:46 p.m.


Por: H. Jose Torres, LC | Fuente: www.somosrc.mx

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

Cristo, Rey nuestro.
¡Venga tu Reino!

Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)

Señor, que te pueda amar para demostrarle a los demás cuánto te amo y que, amándolos, te dé gloria porque para esto me has creado.

Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Lucas 10, 25-37

En aquel tiempo, se presentó ante Jesús un doctor de la ley para ponerlo a prueba y le preguntó: “Maestro, ¿qué debo hacer para conseguir la vida eterna?” Jesús le dijo: “¿Qué es lo que está escrito en la ley? ¿Qué lees en ella?”. El doctor de la ley contestó: “Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu ser, y a tu prójimo como a ti mismo”. Jesús le dijo: “Has contestado bien; si haces eso, vivirás”.

El doctor de la ley, para justificarse, le preguntó a Jesús: “¿Y quién es mi prójimo?” Jesús le dijo: “Un hombre que bajaba por el camino de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos ladrones, los cuales lo robaron, lo hirieron y lo dejaron medio muerto. Sucedió que por el mismo camino bajaba un sacerdote, el cual lo vio y pasó de largo. De igual modo, un levita que pasó por ahí, lo vio y siguió adelante. Pero un samaritano que iba de viaje, al verlo, se compadeció de él, se le acercó, ungió sus heridas con aceite y vino y se las vendó; luego lo puso sobre su cabalgadura, lo llevó a un mesón y cuidó de él. Al día siguiente sacó dos denarios, se los dio al dueño del mesón y le dijo: ‘Cuida de él y lo que gastes de más, te lo pagaré a mi regreso’.

¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del hombre que fue asaltado por los ladrones?”. El doctor de la ley le respondió: “El que tuvo compasión de él”. Entonces Jesús le dijo: “Anda y haz tú lo mismo”.

Palabra del Señor.


Medita lo que Dios te dice en el Evangelio

Es loable la acción del doctor de la ley porque es un ejemplo de cómo debe ser nuestra oración, la cuál es definida por santa Teresa de Ávila como «una conversación con quien sabemos que nos ama». Nuestra oración debe tratar entonces sobre nuestro día a día; debemos preguntarle al Señor sobre las cosas que nos suceden y, así, tendremos más luz sobre los motivos de los eventos que nos pasan. Al preguntarle el doctor de la ley a Jesús por la vida eterna, intuimos que ya lleva un camino recorrido porque es algo que lleva en el corazón y quiere preguntarle al Señor; pero en lugar de recibir una respuesta docta, podríamos decir digna para un doctor de la ley, recibe una luz que ilumina de nuevo lo que ya sabía; así sucede también con nosotros porque, muchas veces, hay cosas sobre las que nos hacemos preguntas y buscamos que alguien nos las resuelva, esperamos que sea algo novedoso, pero pueda ser que la respuesta ya la sepamos y solo necesitemos volverla a ver.

La respuesta a la que Jesús quiere que no refiramos otra vez es la del amor con el cual se pueden resumir todos los mandamientos que, en definitiva, nos llevan a nuestra felicidad eterna. El amor al que Dios nos llama es un deber porque Él mismo nos ha amado primero, y nosotros no podemos más que responder a su amor con amor. Pero cómo amarlo sino en el prójimo que, igual que nosotros, ha sido creado por Dios y por el cual Él nos invita a amarlo. Como dice san Juan quien dice amar a Dios que no ve y no ama a su prójimo que sí ve es un mentiroso, porque nuestro amor a Dios se hace concreto en nuestro amor a los demás.

«La cercanía conoce verbos concretos, los del buen Samaritano: ver, es decir, no mirar para otro lado, no hacer como si no pasara nada, no dejar a la gente esperando y no esconder los problemas bajo la alfombra. Después, acercarse, estar en contacto con la gente, dedicarles más tiempo que al escritorio, no temer el contacto con la realidad, para conocerla y abrazarla. Y luego, vendar las heridas, hacerse cargo, cuidar, entregarse».
(Papa Francisco, discurso del 12 de septiembre de 2019).


Diálogo con Cristo

Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.

Propósito

Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.

Rezar un rosario por alguna persona que me haya hecho un mal.

Despedida

Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.

¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!

Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.

Let's block ads! (Why?)



* Por alguna razón, muchas personas asocian el poder de la fe con las cosas extraordinarias. Es un error. Muchas veces las exigencias principales de la fe suceden en lo ordinario y cotidiano de la vida. * Una comparación: un soldado, aunque no esté en el frente de batalla, debe mantenerse en buen nivel de preparación y entrenamiento para que, precisamente cuando le corresponda la batalla directa, pueda responder bien. * El catolicismo "light" es ya una epidemia en nuestra Iglesia. Pero los costos son muy altos, en términos de deserciones y de incapacidad para afrontar los retos propios del mundo actual. * Hemos de pedir a Dios que nuestra fe sea poderosa, siguiendo, por ejemplo, el esquema de nuestros cinco sentidos: 1. La fe nos permite ver las cosas no desde nuestros intereses, muchas veces inmediatistas, sino desde los intereses de la gloria de Dios y su Reino. 2. La fe nos permite cerrar los oídos a chismes y calumnias, y abrirlos a los testimonios que hablan del Señor y sobre todo a su Palabra. 3. La fe nos da el olfato espiritual para discernir bien y a tiempo; y nos concede alegrarnos en el delicioso aroma de la alabanza que le da la honra al Dios eterno. 4. La fe nos da el paladar que siente asco de una vida de pecado, y percibe la dulzura del Pan de los Ángeles, la Eucaristía. 5. La fe nos permite sentir el dolor del prójimo y brindarle con pureza nuestro afecto en cada saludo y cada abrazo. Source: https://www.spreaker.com/user/fraynelson/el-poder-de-la-fe-en-la-vida-cotidiana_2




* En Marcos 10,46-52 tenemos la sanación del ciego Bartimeo. De ese pasaje destacamos la pregunta de Cristo, en el versículo 51: "¿Qué deseas que haga por ti?" * La pregunta de Cristo nos invita a varias cosas: 1. Descubrir nuestras cegueras e indigencias. En efecto, el mapa de nuestras miserias es el dibujo del mapa de las misericordias de Dios. 2. Descubrir a un Dios que tiene mucho más para decirnos y muchos más para darnos. En efecto, Dios es MÁS que un solucionador de nuestros problemas. Source: https://www.spreaker.com/user/fraynelson/cristo-dice-que-quieres-que-haga-por-ti


10:17 p.m. ,


Suscríbete a nuestro canal 👉 http://bit.ly/SuscribeteTeleVID 👈 El Padre Fray Jorge Iván Duque comparte con nosotros el #EvangelioDeHoy Lunes 7 de Octubre 2019, Lucas Capítulo 10 Versículos 25 al 37. Conéctate con la #LectioDivina 📖 http://bit.ly/EvangelioDeHoy Lectura del santo evangelio según san Lucas (10,25-37): En aquel tiempo, se presentó un maestro de la Ley y le preguntó a Jesús para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?» Él le dijo: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?» Él contestó: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti mismo.» Él le dijo: «Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida.» Pero el maestro de la Ley, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: «¿Y quién es mi prójimo?» Jesús dijo: «Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, cayó en manos de unos bandidos, que lo desnudaron, lo molieron a palos y se marcharon, dejándolo medio muerto. Por casualidad, un sacerdote bajaba por aquel camino y, al verlo, dio un rodeo y pasó de largo. Y lo mismo hizo un levita que llegó a aquel sitio: al verlo dio un rodeo y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él y, al verlo, le dio lástima, se le acercó, le vendó las heridas, echándoles aceite y vino, y, montándolo en su propia cabalgadura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Al día siguiente, sacó dos denarios y, dándoselos al posadero, le dijo: "Cuida de él, y lo que gastes de más yo te lo pagaré a la vuelta." ¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del que cayó en manos de los bandidos?» Él contestó: «El que practicó la misericordia con él.» Díjole Jesús: «Anda, haz tú lo mismo.» #PalabraDelSeñor Eucaristía de hoy: 👉 http://bit.ly/SantaMisaTeleVID 👈 Santo rosario: 👉 http://bit.ly/SantoRosarioCatolico 👈 Un Nuevo Despertar: 👉 http://bit.ly/UnNuevoDespertarTeleVID 👈 Síguenos y haz parte de nuestro canal: Facebook: https://www.facebook.com/televid.tv Twitter: https://twitter.com/Canaltelevid Página web: http://www.televid.tv/ Haz tus donaciones en: http://televid.tv/donar/




* En Marcos 5,34 o en Lucas 17,19, Cristo dice: "Tu fe te ha salvado." ¿Cómo nos salva la fe? Para comprenderlo debemos entender primero que todos los seres humanos tenemos DESEOS y también RECURSOS. * Nuestros SIETE principales recursos a la hora de enfrentar la vida son: 1. Buena salud (y posiblemente un cuerpo en forma) 2. Buenos conocimientos (que incluye experiencia o títulos académicos) 3. Grandes y ambiciosos planes (que suponemos que harán una diferencia en el mundo) 4. Convicciones profundas (que permiten ver al mundo con jerarquías de prioridades) 5. Suficiente paz interior (que implica poder poner un límite a las preocupaciones) 6. Amigos, o conexiones, o alianzas, o buen equipo. 7. Apropiada solidez económica. * Cuando uno tiene varios de esos puntos, uno se siente "fuerte" y tiende a apoyarse en sí mismo, incluso si eso le lleva a ser víctima de la propia soberbia, egoísmo o amargura. DE ESO nos salva la fe! * La fe es, dentro de esta explicación, un DES-CENTRAMIENTO de nuestro ego y un empezar a centrarnos en Jesucristo, porque Él se ha ganado nuestra confianza. * Nuestra fe es RESPUESTA de amor y confianza en Él, que se traduce en obediencia y acogida de su Palabra, su ser y del Reinado de Dios.


10:47 a.m.


La palabra del Señor se dirigió a Jonás, hijo de Amitai, en estos términos: "Parte ahora mismo para Nínive, la gran ciudad, y clama contra ella, porque su maldad ha llegado hasta mí". Pero Jonás partió para huir a Tarsis, lejos de la presencia del Señor. Bajó a Jope y encontró allí un barco que zarpaba hacia Tarsis; pagó su pasaje y se embarcó para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia del Señor. Pero el Señor envió un fuerte viento sobre el mar, y se desencadenó una tempestad tan grande que el barco estaba a punto de partirse. Los marineros, aterrados, invocaron cada uno a su dios, y arrojaron el cargamento al mar para aligerar la nave. Mientras tanto, Jonás había descendido al fondo del barco, se había acostado y dormía profundamente. El jefe de la tripulación se acercó a él y le preguntó: "¿Qué haces aquí dormido? Levántate e invoca a tu dios. Tal vez ese dios se acuerde de nosotros, para que no perezcamos". Luego se dijeron unos a otros: "Echemos suertes para saber por culpa de quién nos viene este desgracia". Así lo hicieron, y la suerte recayó sobre Jonás. Entonces le dijeron: "Explícanos por qué nos sobrevino esta desgracia. ¿Cuál es tu oficio? ¿De dónde vienes? ¿Cuál es tu país? ¿A qué pueblo perteneces?". El les respondió: "Yo soy hebreo y venero al Señor, el Dios del cielo, el que hizo el mar y la tierra". Aquellos hombres sintieron un gran temor, y le dijeron: "¡Qué has hecho!", ya que comprendieron, por lo que él les había contado, que huía de la presencia del Señor. Y como el mar se agitaba cada vez más, le preguntaron: "¿Qué haremos contigo para que el mar se nos calme?". Jonás les respondió: "Levántenme y arrójenme al mar, y el mar se les calmará. Yo sé muy bien que por mi culpa les ha sobrevenido esta gran tempestad". Los hombres se pusieron a remar con fuerza, para alcanzar tierra firme; pero no lo consiguieron, porque el mar se agitaba cada vez más contra ellos. Entonces invocaron al Señor, diciendo: "¡Señor, que no perezcamos a causa de la vida de este hombre! No nos hagas responsables de una sangre inocente, ya que tú, Señor, has obrado conforme a tu voluntad". Luego, levantaron a Jonás, lo arrojaron al mar, y en seguida se aplacó la furia del mar. Los hombres, llenos de un gran temor al Señor, le ofrecieron un sacrificio e hicieron votos. El Señor hizo que un gran pez se tragara a Jonás, y este permaneció en el vientre del pez tres días y tres noches. Entonces el Señor dio una orden al pez, y este arrojó a Jonás sobre la tierra firme.

10:47 a.m.


Entonces Jonás oró al Señor, su Dios, desde el vientre del pez, diciendo: "Desde mi angustia invoqué al Señor, y él me respondió; desde el seno del Abismo, pedí auxilio, y tú escuchaste mi voz. Tú me arrojaste a lo más profundo, al medio del mar: la corriente me envolvía, ¡todos tus torrentes y tus olas pasaron sobre mí! Entonces dije: He sido arrojado lejos de tus ojos, pero yo seguiré mirando hacia tu santo Templo. Cuando mi alma desfallecía, me acordé del Señor, y mi oración llegó hasta ti, hasta tu santo Templo.

10:47 a.m.


Un doctor de la Ley se levantó y le preguntó para ponerlo a prueba: "Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la Vida eterna?". Jesús le preguntó a su vez: "¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?". El le respondió: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con todo tu espíritu, y a tu prójimo como a ti mismo". "Has respondido exactamente, le dijo Jesús; obra así y alcanzarás la vida". Pero el doctor de la Ley, para justificar su intervención, le hizo esta pregunta: "¿Y quién es mi prójimo?". Jesús volvió a tomar la palabra y le respondió: "Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos ladrones, que lo despojaron de todo, lo hirieron y se fueron, dejándolo medio muerto. Casualmente bajaba por el mismo camino un sacerdote: lo vio y siguió de largo. También pasó por allí un levita: lo vio y siguió su camino. Pero un samaritano que viajaba por allí, al pasar junto a él, lo vio y se conmovió. Entonces se acercó y vendó sus heridas, cubriéndolas con aceite y vino; después lo puso sobre su propia montura, lo condujo a un albergue y se encargó de cuidarlo. Al día siguiente, sacó dos denarios y se los dio al dueño del albergue, diciéndole: 'Cuídalo, y lo que gastes de más, te lo pagaré al volver'. ¿Cuál de los tres te parece que se portó como prójimo del hombre asaltado por los ladrones?". "El que tuvo compasión de él", le respondió el doctor. Y Jesús le dijo: "Ve, y procede tú de la misma manera".

10:47 a.m.


La parábola del buen Samaritano (cf. Lc 10, 25-37) nos lleva sobre todo a dos aclaraciones importantes. Mientras el concepto de “prójimo” hasta entonces se refería esencialmente a los conciudadanos y a los extranjeros que se establecían en la tierra de Israel, y por tanto a la comunidad compacta de un país o de un pueblo, ahora este límite desaparece. Mi prójimo es cualquiera que tenga necesidad de mí y que yo pueda ayudar. Se universaliza el concepto de prójimo, pero permaneciendo concreto. Aunque se extienda a todos los hombres, el amor al prójimo no se reduce a una actitud genérica y abstracta, poco exigente en sí misma, sino que requiere mi compromiso práctico aquí y ahora. La Iglesia tiene siempre el deber de interpretar cada vez esta relación entre lejanía y proximidad, con vistas a la vida práctica de sus miembros. En fin, se ha de recordar de modo particular la gran parábola del Juicio final (cf. Mt 25, 31-46), en el cual el amor se convierte en el criterio para la decisión definitiva sobre la valoración positiva o negativa de una vida humana. Jesús se identifica con los pobres: los hambrientos y sedientos, los forasteros, los desnudos, enfermos o encarcelados. “Cada vez que lo hicisteis con uno de estos mis humildes hermanos, conmigo lo hicisteis” (Mt 25, 40). Amor a Dios y amor al prójimo se funden entre sí: en el más humilde, encontramos a Jesús mismo y en Jesús encontramos a Dios.



Source: https://www.spreaker.com/user/fraynelson/enfermedades-de-nuestro-tiempo-bajo-resp * Vivimos una doble crisis: IRRESPETO a diversos niveles, desde la sociedad en su conjunto hasta la intimidad de la pareja; y luego, lo que parece contrario: INDIFERENCIA, que deja en soledad y depresión a tantas personas, causando incluso epidemias de suicidio. * Es importante tener claro que estos daños no se reparan simplemente con actos externos, a manera de simple cortesía o un tratar de "guardar las formas." * El respeto brota de una actitud interior que tiene su origen en la conciencia del valor de la otra persona. Esta conciencia se hace muy clara e intensa cuando está acompañada por la oración que nos revela el auténtico precio de cada vida humana. * Y esa misma actiud que otorga su valor al prójimo nos ayuda a verlo como objeto de la misericordia divina, esto es, como persona en necesidad, con lo cual es derrotada también la indiferencia.


2:02 a.m. ,


#ClickToPray es la red mundial de oración del Papa Francisco. Sigue con nosotros: 🙏 http://bit.ly/ClickToPrayTeleVID Suscríbete a nuestro canal 👉 http://bit.ly/SuscribeteTeleVID 👈 La Santa Misa 👉 http://bit.ly/SantaMisaTeleVID 🙏 Lectio Divina: 👉 http://bit.ly/EvangelioDeHoy 👈 Santo rosario: 👉 http://bit.ly/SantoRosarioCatolico 👈 #PapaFrancisco #OrarConElPapa Síguenos y haz parte de nuestro canal: Facebook: https://www.facebook.com/televid.tv Twitter: https://twitter.com/Canaltelevid Página web: http://www.televid.tv/ Haz tus donaciones en: http://televid.tv/donar/


12:46 a.m.
Bloch-Sermon_On_The_Mount

🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹
_”Verbum Spei”_
_”Palabra de Esperanza”_
https://m.facebook.com/ParroquiaSanPabloAcala/
🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸
*27° Domingo Tiempo Ordinario*
*El Evangelio de hoy*
*Lucas: 17, 5-10*

En aquel tiempo, los apóstoles dijeron al Señor: “Auméntanos la fe”. El Señor les contestó: “Si tuvieran fe, aunque fuera tan pequeña como una semilla de mostaza, podrían decirle a ese árbol frondoso: Arráncate de raíz y plántate en el mar’, y los obedecería.
¿Quién de ustedes, si tiene un siervo que labra la tierra o pastorea los rebaños, le dice cuando éste regresa del campo: ‘Entra en seguida y ponte a comer’? ¿No le dirá más bien: ‘Prepárame de comer y disponte a servirme, para que yo coma y beba; después comerás y beberás tú’? ¿Tendrá acaso que mostrarse agradecido con el siervo, porque éste cumplió con su obligación? Así también ustedes, cuando hayan cumplido todo lo que se les mandó, digan: ‘No somos más que siervos; sólo hemos hecho lo que teníamos que hacer’ “.

*Reflexión:*
Señor, auméntanos la fe. Los discípulos reconocen que su fe es débil, pobre. Que han escuchado a Jesús predicar y hacer milagros muchas veces, que lo siguen de verdad, pero que en el fondo de su corazón no tienen todavía esta confianza plena en un Dios que quiere que le entreguemos toda nuestra vida. La respuesta de Jesús es una invitación a no preocuparse por la cantidad de fe, o de su tamaño, sino a buscar una fe verdadera, auténtica, que concuerde con nuestras palabras y acciones. Por eso le dice que aunque su fe sea pequeña como un grano de mostaza, una semilla diminuta que es fácil de perder, si es auténtica serán capaces de mandar a un árbol arrancarse de su lugar y plantarse en el mar.
La fe nos lleva a reconocernos no como señores que pueden mandar y pedir a Dios lo que deseamos, como muchas veces hacemos los cristianos, sino como siervos que escuchan la voz del Señor y que cumplen sus mandatos, poniendo la confianza en Él, que nunca se olvida de los que le aman.

*Oración*
Señor Jesús, te damos gracias por nuestra fe que de ti hemos recibido como un don a desarrollar con tu ayuda. Haz que nuestra fe crezca cada día, que dé sentido a nuestra vida y que se exprese en amor y justicia. Amén.

*Acción*
Hoy es el primer domingo del mes de octubre, el mes misionero por excelencia. En el que se celebra además el Domingo Mundial de las misiones. Seamos misioneros ya que un misionero es aquel que, allá donde va, lleva la fe cristiana, el Evangelio.
🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹
_”Nuntium Verbi Dei”_
_“Mensaje de la palabra de Dios”_
🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸