Ártículos Más Recientes

10:44 a.m.


Hermanos: Tenemos plena seguridad de que podemos entrar en el Santuario por la sangre de Jesús, siguiendo el camino nuevo y viviente que él nos abrió a través del velo del Templo, que es su carne. También tenemos un Sumo Sacerdote insigne al frente de la casa de Dios. Acerquémonos, entonces, con un corazón sincero y llenos de fe, purificados interiormente de toda mala conciencia y con el cuerpo lavado por el agua pura. Mantengamos firmemente la confesión de nuestra esperanza, porque aquel que ha hecho la promesa es fiel. Velemos los unos por los otros, para estimularnos en el amor y en las buenas obras. No desertemos de nuestras asambleas, como suelen hacerlo algunos; al contrario, animémonos mutuamente, tanto más cuanto que vemos acercarse el Día.

10:44 a.m.


Del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella, el mundo y todos sus habitantes, porque El la fundó sobre los mares, Él la afirmó sobre las corrientes del océano. ¿Quién podrá subir a la Montaña del Señor y permanecer en su recinto sagrado? El que tiene las manos limpias y puro el corazón; el que no rinde culto a los ídolos. él recibirá la bendición del Señor, la recompensa de Dios, su Salvador. Así son los que buscan al Señor, los que buscan tu rostro, Dios de Jacob.

10:44 a.m.


Jesús les decía: "¿Acaso se trae una lámpara para ponerla debajo de un cajón o debajo de la cama? ¿No es más bien para colocarla sobre el candelero? Porque no hay nada oculto que no deba ser revelado y nada secreto que no deba manifestarse. ¡Si alguien tiene oídos para oír, que oiga!". Y les decía: "¡Presten atención a lo que oyen! La medida con que midan se usará para ustedes, y les darán más todavía. Porque al que tiene, se le dará, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene".

10:44 a.m.


    El evangelio lo puede penetrar profundamente en las conciencias, en la vida y en el trabajo de un pueblo sin la presencia activa de los seglares. Por ello, ya al tiempo de fundar la Iglesia hay que atender sobre todo a la constitución de un maduro laicado cristiano...La obligación principal de los seglares, hombres y mujeres, es el testimonio de Cristo, que deben dar con la vida y con la palabra en la familia, en su grupo social y en el ámbito de su profesión. Es necesario que en ellos aparezca el hombre nuevo, creado según Dios en justicia y santidad verdadera (cf Ef 4,24). Y deben expresar esta vida nueva en el ambiente de la sociedad y de la cultura patria, según las tradiciones de su nación.Tienen que conocer esta cultura, sanearla y conservarla, desarrollarla según las nuevas condiciones y, finalmente, perfeccionarla en Cristo, para que la fe cristiana y la vida de la Iglesia no sea ya extraña a la sociedad en que viven, sino que empiece a penetrarla y transformarla. Únanse a sus conciudadanos con sincera caridad a fin de que en el trato con ellos aparezca el nuevo vínculo de unidad y de solidaridad universal que brota del misterio de Cristo. Siembren también la fe de Cristo entre sus compañeros de trabajo, obligación que tanto más urge cuandto que muchos hombres no pueden oír hablar del evangelio ni conocer a Cristo más que por sus vecinos seglares....     Los ministros de la Iglesia, por su parte, aprecien grandemente el activo apostolado de los seglares. Fórmenlos para que, como miembros de Cristo, sean conscientes de su responsabilidad en pro de todos los hombres; instrúyanlos profundamente en el misterio de Cristo; inícienlos en los métodos prácticos y asístanles en las dificultades...     Observando, pues, las funciones y responsabilidades propias de los pastores y de los seglares, dé toda la Iglesia joven testimonio vivo y firme de Cristo, para convertirse en señal luminosa de la salvación, que nos llegó en Cristo.

Hermanos Franciscanos

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.