¡Aleluya! ¡Feliz el hombre que teme al Señor y valora mucho sus mandamientos! Su semilla será pujante en el país, los retoños del hombre bueno serán benditos. Habrá en su casa bienes y riquezas, y su honradez, que durará para siempre. Brilla como luz en las tinieblas para los de recto corazón; él comprende, es clemente y justo. Es generoso en dar a los pobres, su honradez permanece para siempre, su cuerno aumenta en gloria. June 17, 2013 at 05:00PM
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