Homilía del Papa Francisco en la Misa de conclusión del Sínodo de los jóvenes, 28.10.18

5:44 a.m.


28 de octubre de 2018.- (13 TV / Vatican News / Camino Católico) El Papa Francisco ha presidido, este domingo 28 de octubre en la Basílica de San Pedro del Vaticano, la Misa de clausura de la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que, desde el 3 hasta el 27 de octubre, se ha desarrollado en Roma. En su homilía, el Santo Padre reflexionó sobre los tres ejes en los que han girado los trabajos de los padres sinodales en estas tres semanas: escucha, acompañamiento y testimonio. Sobre la escucha, Francisco ha hablado del “apostolado del oído: escuchar, antes de hablar”. “¡Qué importante es para nosotros escuchar la vida!”, ha exclamado. Escuchar “el grito del que pide ayuda”. “Los hijos del Padre celestial escuchan a sus hermanos: no las murmuraciones inútiles, sino las necesidades del prójimo. Escuchar con amor, con paciencia, como hace Dios con nosotros, con nuestras oraciones a menudo repetitivas. Dios nunca se cansa, siempre se alegra cuando lo buscamos”, ha explicado. En segundo lugar, el Pontífice ha hablado sobre el acompañamiento en el camino de fe, es decir, “hacerse prójimos”. El Papa ha explicado que el Señor se implica “en primera persona con un amor de predilección por cada uno. Ya en su modo de actuar transmite su mensaje: así la fe brota en la vida”. Ese acompañamiento es esencial para el camino de fe, pues “la fe pasa por la vida. Cuando la fe se concentra exclusivamente en las formulaciones doctrinales, se corre el riesgo de hablar solo a la cabeza, sin tocar el corazón. Y cuando se concentra solo en el hacer, corre el riesgo de convertirse en moralismo y de reducirse a lo social”. El Papa ha dicho que la cercanía es esencial para la transmisión de la fe. “Proximidad: aquí está el secreto para transmitir el corazón de la fe, no un aspecto secundario”. “Hacerse prójimos es llevar la novedad de Dios a la vida del hermano, es el antídoto contra la tentación de las recetas preparadas. Preguntémonos si somos cristianos capaces de ser prójimos, de salir de nuestros círculos para abrazar a los que ‘no son de los nuestros’ y que Dios busca ardientemente”. El tercer eje es testimoniar. “No es cristiano esperar que los hermanos que están en busca llamen a nuestras puertas; tendremos que ir donde están ellos, no llevándonos a nosotros mismos, sino a Jesús”. “Él nos envía, como a aquellos discípulos, para animar y levantar en su nombre. Él nos envía a decirles a todos: ‘Dios te pide que te dejes amar por Él’”. El Papa finalizó su homilía afirmando que “la fe es una cuestión de encuentro, no de teoría. En el encuentro Jesús pasa, en el encuentro palpita el corazón de la Iglesia. Entonces, lo que será eficaz es nuestro testimonio de vida, no nuestros sermones”. En el vídeo de 13 TV se visualiza y escucha la homilía del Santo Padre traducida al español.


Publicar un comentario

[facebook][blogger][disqus]

Hermanos Franciscanos

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.