2° Domingo Tiempo Ordinario

_”Verbum Spei”_
_”Palabra de Esperanza”_
https://m.facebook.com/ParroquiaSanPabloAcala/
*2° Domingo Tiempo Ordinario*
*El Evangelio de hoy*
*Juan 1, 29-34*
Estando Juan bautizando al otro lado del Jordán, vio venir a Jesús y dijo: “Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. A Él me refería cuando dije: ‘Detrás de mí viene un hombre que está por encima de mí, porque existía antes que yo’. Yo no lo conocía, pero precisamente vine a bautizar con agua para que Él se manifieste a Israel”. Juan dio este testimonio: “Yo presencié cómo el Espíritu descendía del cielo como paloma y permanecía sobre Él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: ‘Aquel sobre quien veas descender el Espíritu y permanecer sobre Él, es el que ha de bautizar con Espíritu Santo’. Yo lo vi y declaro en calidad de testigo que Él es el Hijo de Dios”.
*Reflexión*
Jesús es el elegido de Dios para traer la salvación a todos los pueblos. El amor y el perdón de Dios no se destinan de forma exclusiva a una raza, a un pueblo o a una cultura. Es para todos sin excepción. Para esa misión, Jesús está ungido por el Espíritu Santo, por el Espíritu de Dios. Ese Espíritu es el que le convierte en Hijo de Dios. Esa misión se centra en el perdón de los pecados, en la reconciliación, que abre las puertas a una vida más plena. Jesús nos invita a la conversión porque en él tenemos una oportunidad real de comenzar una nueva vida.
Al ser bautizados en Jesús, somos incorporados a él. Por eso, podemos decir con seguridad que somos un pueblo santo, que estamos llenos del Espíritu Santo y que tenemos la misión de ofrecer el amor y la salvación de Dios a todos los que nos rodean. Porque ese amor de Dios no es para nosotros en exclusiva. Es para todos. Sería bueno que nos mirásemos unos a otros. En los bancos de nuestra iglesia vemos gente normal. ¿Seguro? Sí, gente normal, pero también “pueblo santo”, “pueblo consagrado”, “testigos del amor de Dios en medio del mundo”. Cuando salimos cada domingo de la misa, debemos saber que se nos ha dado la misión de ser testigos del amor de Dios. La gracia y la paz de Dios están con nosotros. Su Espíritu nos llena. Hoy es tiempo de levantar la cabeza y sentirnos orgullosos de lo que somos. Somos el pueblo de Dios y tenemos una misión que cumplir: mostrar al mundo con nuestra vida, con nuestra forma de ser, actuar y hablar, que Dios está con nosotros y que nos ama, que no hay pecado que no merezca el perdón, que Dios siempre nos espera para devolvernos la vida y que este mensaje es para toda la humanidad.
*Oración*
Señor Jesús, danos el valor para dar testimonio de ti. Que tu Espíritu descienda y permanezca también en nosotros, para que nuestro testimonio sea creíble gracias a nuestro modo de vida. Amén.
*Acción*
Para reflexionar: ¿Cómo actuó Jesús para dar testimonio del amor de Dios a los hombres y mujeres con que se encontró? ¿Nos sentimos orgullosos de ser cristianos, de participar en la misión de Jesús?
_”Nuntium Verbi Dei”_
_“Mensaje de la palabra de Dios”_