sábado 23 Abril 2016 : Libro de los Hechos de los Apóstoles 1344-52.

🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹
“Verbum Spei”
“Palabra de Esperanza”
🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸
4° Viernes Pascua
El Evangelio de hoy
Juan 14, 1-6
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus Discípulos: “No pierdan la paz. Si creen en Dios, crean también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas habitaciones. Si no fuera así, yo se lo habría dicho a ustedes, porque voy a prepararles un lugar. Cuando me vaya y les prepare un sitio, volveré y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, estén también ustedes. Y ya saben el camino para llegar al lugar a donde voy”.
Entonces Tomás le dijo: “Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo podemos saber el camino?” Jesús le respondió: “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie va al Padre, sino por mí”.
Reflexión:
Ciertamente para los apóstoles y para los discípulos podría haber habido confusión en cuanto a dónde se dirigía Jesús, pero para nosotros esto es ahora claro, pues después de la resurrección sabemos que él ha ido al Padre, es decir, al cielo y es precisamente ahí en donde nos ha preparado una habitación.
Sin embargo, la pregunta de Tomás es todavía actual en algunos de nosotros: “¿Cuál es el camino para llegar a dónde tú vas?” Jesús nos responde de nuevo: “Yo soy ese camino”. El camino para llegar al cielo es una vida vivida en Jesús, con Jesús, de acuerdo a Jesús, para Jesús, desde Jesús. San Pablo lo resume así “vivir en Cristo”, de manera que ya no soy yo quien vive sino que es Cristo quien vive en mí. Es un proceso de despojarse del hombre viejo, del hombre que quiere vivir en sí mismo, para sí mismo y desde su propio egoísmo.
El camino es revestirnos de Jesús, buscar como lo dice Pablo: tener las mismas actitudes de él, que siendo Dios se rebajó hasta hacerse semejante a nosotros. Pedro, en su carta, nos invita a “seguir las huellas de nuestro pastor”. Si verdaderamente queremos llegar un día a habitar el lugar preparado por Jesús para cada uno de nosotros, ya sabemos cuál es el camino: Jesús mismo.
(Evangelización Activa).
Oración:
Señor Jesús, quiero que mi vida, mis actitudes, mi amor, sean una invitación abierta y constante, para que los que viven a mi lado participen y disfruten también del cielo, no sólo al final de su vida, sino incluso ya desde ahora. Amén.
Acción:
En este día buscaré algún mensaje sobre la vida de Jesús, y se lo haré llegar a mis contactos de correo electrónico e imprimiré algunos para otros conocidos.
🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹
“Nuntium Verbi Dei
“Mensaje de la palabra de Dios”
🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸