Ártículos Más Recientes

11:16 a.m.
¡Maldito sea el tramposo que tiene un animal macho en su rebaño, lo ofrece en voto y después sacrifica al Señor uno mutilado! Porque yo soy un gran Rey, dice el Señor de los ejércitos, y mi Nombre es temible entre las naciones. ¡Y ahora, para ustedes es esta advertencia, sacerdotes! Si no escuchan y no se deciden a dar gloria a mi Nombre, dice el Señor de los ejércitos, yo enviaré sobre ustedes la maldición y maldeciré sus bendiciones; ya las he maldecido, porque ustedes no se deciden a hacer eso. Pero ustedes se han desviado del camino, han hecho tropezar a muchos con su doctrina, han pervertido la alianza con Leví, dice el Señor de los ejércitos. Por eso yo los he hecho despreciables y viles para todo el pueblo, porque ustedes no siguen mis caminos y hacen acepción de personas al aplicar la Ley. ¿No tenemos todos un solo Padre? ¿No nos ha creado un solo Dios? ¿Por qué nos traicionamos unos a otros, profanando así la alianza de nuestros padres?

11:16 a.m.
si bien, como Apóstoles de Cristo, teníamos el derecho de hacernos valer. Al contrario, fuimos tan condescendientes con ustedes, como una madre que alimenta y cuida a sus hijos. Sentíamos por ustedes tanto afecto, que deseábamos entregarles, no solamente la Buena Noticia de Dios, sino también nuestra propia vida: tan queridos llegaron a sernos. Recuerden, hermanos, nuestro trabajo y nuestra fatiga cuando les predicamos la Buena Noticia de Dios, trabajábamos día y noche para no serles una carga. Nosotros, por nuestra parte, no cesamos de dar gracias a Dios, porque cuando recibieron la Palabra que les predicamos, ustedes la aceptaron no como palabra humana, sino como lo que es realmente, como Palabra de Dios, que actúa en ustedes, los que creen.

11:16 a.m.
Jesús dijo a la multitud y a sus discípulos: "Los escribas y fariseos ocupan la cátedra de Moisés; ustedes hagan y cumplan todo lo que ellos les digan, pero no se guíen por sus obras, porque no hacen lo que dicen. Atan pesadas cargas y las ponen sobre los hombros de los demás, mientras que ellos no quieren moverlas ni siquiera con el dedo. Todo lo hacen para que los vean: agrandan las filacterias y alargan los flecos de sus mantos; les gusta ocupar los primeros puestos en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, ser saludados en las plazas y oírse llamar 'mi maestro' por la gente. En cuanto a ustedes, no se hagan llamar 'maestro', porque no tienen más que un Maestro y todos ustedes son hermanos. A nadie en el mundo llamen 'padre', porque no tienen sino uno, el Padre celestial. No se dejen llamar tampoco 'doctores', porque sólo tienen un Doctor, que es el Mesías. Que el más grande de entre ustedes se haga servidor de los otros, porque el que se ensalza será humillado, y el que se humilla será ensalzado".

11:16 a.m.
El Señor nos advierte que las palabras halagadoras y el aspecto amable deben juzgarse por los frutos que producen. Debemos entonces apreciar a alguien, no por como se presenta en palabras, pero tal y como realmente es en sus actos. Pues a menudo bajo apariencias de ovejas se disimula una rabia de lobo (Mt 7:15). Y así como los espinos no producen uvas, ni los abrojos higos..., nos dice Jesús, no es en esas bellas palabras que consiste la realidad de las buenas obras; todos los hombres deben ser juzgados según sus frutos (v.16-18) No, un servicio que se limitaría a pronunciar bellas palabras no es suficiente para obtener el Reino de los cielos; no es aquel que diga: «Señor, Señor» quien será el heredero (v.21). ¿A qué rimaría una santidad que se limitaría solamente a la invocación de un nombre, si el camino del Reino de los cielos se encuentra en la obediencia de la Voluntad de Dios? Debemos poner de nuestra parte, si queremos alcanzar la felicidad eterna. Debemos dar algo de nuestros fondos propios: desear el bien, evitar el mal y obedecer de todo corazón los preceptos divinos. Seremos reconocidos por Dios como suyos por una actitud como esta. Conformemos pues nuestros actos a su voluntad en vez de glorificarnos de su poder. Porque despreciará y rechazará aquellos que se alejaran ellos mismos de él por la injusticia de sus actos.

12:12 a.m.
Bloch-Sermon_On_The_Mount

🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹

                *“Verbum Spei”*

         _“Palabra de Esperanza”_

https://m.facebook.com/Parroquiasrcalvario

🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸

*30° Sábado Tiempo Ordinario*

*El Evangelio de hoy*

*Lucas 14, 1. 7-11*

Un sábado, Jesús fue a comer en casa de uno de los jefes de los fariseos, y éstos estaban espiándolo. Mirando cómo los convidados escogían los primeros lugares, les dijo esta parábola:

“Cuando te inviten a un banquete de bodas, no te sientes en el lugar principal, no sea que haya algún otro invitado más importante que tú, y el que los invitó a los dos venga a decirte: ‘Déjale el lugar a éste’, y entonces tengas que ir a ocupar lleno de vergüenza, el último asiento. Por el contrario, cuando te inviten, ocupa el último lugar, para que, cuando venga el que te invitó, te diga: ‘Amigo, acércate a la cabecera’. Entonces te verás honrado en presencia de todos los convidados. Porque el que se engrandece a sí mismo, será humillado; y el que se humilla, será engrandecido”.

*Reflexión:*

Parece ser un mal en el corazón del hombre el deseo de grandeza; mal que padecemos desde la misma creación y que sería la causa del pecado original. En aquellos albores de la humanidad el Tentador le dijo a Eva: “Serán como dioses”, y esta propuesta sedujo a Eva hasta el punto de desobedecer a Dios. Esta propuesta se nos hace continuamente y por ello muchas veces nos sentimos “superior a cualquiera”, y creemos que todo lo merecemos y que los demás están precisamente para servirnos.

Lo malo es que, por más que seamos importantes, buenos, serviciales, siempre habrá uno más que nosotros. La humildad es una de las virtudes que producen mas satisfacciones interiores; es además el antídoto contra la soberbia que siempre es fuente y nutrimento para otros pecados. Siempre debemos dejar que sea Dios mismo quien nos honre y no tomar la honra por nuestra cuenta.

María Santísima es grande, precisamente porque se presentó como la “humilde sierva” y es desde ahí donde Dios la levantó hasta convertirla en modelo y arquetipo de la Iglesia, por lo que con gran acierto profetizó ella cuando dice en su hermoso cántico: “Desde ahora todas las generaciones me llamarán bienaventurada”. Dios la ha puesto en un pedestal; así también Dios hace con los que, como ella, se humillan ante Dios y reconocen su necesidad de salvación, de perdón, de Dios. No es fácil, pero si trabajamos en la humildad, poco a poco irá saliendo de nosotros de manera natural, pero hay que iniciar ya. 

(Evangelización Activa).

*Oración:*

Señor Jesús, de pronto estoy llegando al límite de mis fuerzas y todo a mí alrededor me dice que debo seguir adelante, pero me faltan las fuerzas, y es aquí donde te invoco y pido tu presencia en mi vida; porque ya no puedo más. Amén.

*Acción:*

Hoy cumpliré con el deber de todo bautizado y viviré para servir. Además participaré en el banquete Eucarístico pidiendo a Dios ser humilde como Él.

🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹🔹

      *“Nuntium Verbi Dei”*

_“Mensaje de la palabra de Dios”_

🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸🔸


Hermanos Franciscanos

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Con tecnología de Blogger.