Reflexión breve de Lc 9,28-36: En aquel tiempo, Jesús cogió a Pedro, a Juan y a Santiago y subió a lo alto de la montaña, para orar. Y, mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió, sus vestidos brillaban de blancos. De repente, dos hombres conversaban con él: eran Moisés y Elías, que, apareciendo con gloria, hablaban de su muerte, que iba a consumar en Jerusalén. Pedro y sus compañeros se caían de sueño; y, espabilándose, vieron su gloria y a los dos hombres que estaban con él. Mientras éstos se alejaban, dijo Pedro a Jesús: -«Maestro, qué bien se está aquí. Haremos tres tiendas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» No sabía lo que decía. Todavía estaba hablando, cuando llegó una nube que los cubrió. Se asustaron al entrar en la nube. Una voz desde la nube decía: -«Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle.» Cuando sonó la voz, se encontró Jesús solo. Ellos guardaron silencio y, por el momento, no contaron a nadie nada de lo que habían visto.
Suscríbete a nuestro canal 👉 http://bit.ly/SuscribeteTeleVID 👈 El Padre Fray Alejandro Tobón comparte con nosotros el #EvangelioDeHoy Martes 6 de Agosto 2019, Mateo Capítulo 17 Versículos 1 al 9. Conéctate con la #LectioDivina 📖 http://bit.ly/EvangelioDeHoy Lectura del santo evangelio según san Mateo (17,1-9): En aquel tiempo, Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a su hermano Juan y se los llevó aparte a una montaña alta. Se transfiguró delante de ellos, y su rostro resplandecía como el sol, y sus vestidos se volvieron blancos como la luz. Y se les aparecieron Moisés y Elías conversando con él. Pedro, entonces, tomó la palabra y dijo a Jesús: «Señor, ¡qué bien se está aquí! Si quieres, haré tres tiendas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» Todavía estaba hablando cuando una nube luminosa los cubrió con su sombra, y una voz desde la nube decía: «Éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto. Escuchadlo.» Al oírlo, los discípulos cayeron de bruces, llenos de espanto. Jesús se acercó y, tocándolos, les dijo: «Levantaos, no temáis.» Al alzar los ojos, no vieron a nadie más que a Jesús, solo. Cuando bajaban de la montaña, Jesús les mandó: «No contéis a nadie la visión hasta que el Hijo del hombre resucite de entre los muertos.» #PalabraDelSeñor Eucaristía de hoy: 👉 http://bit.ly/SantaMisaTeleVID 👈 Santo rosario: 👉 http://bit.ly/SantoRosarioCatolico 👈 Un Nuevo Despertar: 👉 http://bit.ly/UnNuevoDespertarTeleVID 👈 Síguenos y haz parte de nuestro canal: YouTube: https://www.youtube.com/c/TeleVID Facebook: https://www.facebook.com/televid.tv Twitter: https://twitter.com/Canaltelevid Página web: http://www.televid.tv/ Haz tus donaciones en: http://televid.tv/donar/
* Formarnos interiormente es como limpiar el canal para que el agua pura del Evangelio llegue a los demás. Formarse es ya un acto de caridad para con el prójimo. * Formarse implica darle más y más espacio a Cristo en la propia vida, y ello implica un proceso de cruz, o incluso, diríamos, de muerte: morir a nosotros mismos. Así lo expresó y vivió San Pablo. * ¿Cómo se formaban los primeros apóstoles? Compartiendo la vida. Así formó Cristo a los suyos, y así obró Pablo con Timoteo y Tito. Ese tipo de formación "por proximidad" fue lo más común para los sacerdotes durante más de mil años, por lo menos en lo que atañe al clero que llamamos "diocesano." * Otra línea de formación vino por el camino monástico. El impulso primero en la vocación del monje no es la atención pastoral al Pueblo de Dios sino el llamado a vivir el Evangelio hasta "ser Evangelio," por así decirlo. Pero esa búsqueda sincera, y en ocasiones, intensa y cargada de amor, hizo que muchos monjes fueran considerados por la Iglesia como candidatos óptimos para servir a otros el Pan de la Palabra, la gracia de los sacramentos y el cuidado pastoral siempre tan urgente. * Ante los graves desafíos de todo orden que enfrentó la Iglesia en el siglo XVI, el Concilio de Trento ordenó que de modo ordinario la formación sacerdotal se diera en el contexto de lo que nosotros llamamos "seminarios." * Un seminario intenta recoger lo mejor de las dos tradiciones de formación: la convivencia cercana y fraterna con hermanos sacerdotes ya más experimentados, y el necesario recogimiento que ayuda a escuchar con mayor profundidad la voz y el querer de Dios. * Un seminario no es entonces propiamente una familia (en la que los esposos se han escogido, pues nosotros hemos sido escogidos por Cristo); ni una universidad (en la que prima el interés propio y la búsqueda de compensaciones); ni un regimiento militar (que de suyo no tiende a la formación en la compasión y la misericordia). * * * Más predicación en: http://fraynelson.com/blog ADEMÁS: Suscríbete gratuitamente a mi boletín diario de evangelización: http://fraynelson.com/suscripciones.html Página de los DOMINICOS en Colombia: http://opcolombia.org